
San José de Ocoa, República Dominicana – Julio 2025. Un colmado ubicado en el barrio San Antonio fue asaltado en la madrugada del pasado martes, cuando dos sujetos armados ingresaron al establecimiento y sustrajeron dinero en efectivo, cigarrillos y artículos de primera necesidad.
Según testigos, los asaltantes, con los rostros cubiertos, aprovecharon que el dueño del negocio —un hombre de 58 años— realizaba el cierre nocturno. Lo redujeron brevemente, le exigieron las llaves de la caja registradora y huyeron en una motocicleta sin placas. Afortunadamente, el comerciante no sufrió heridas físicas, aunque sí un fuerte impacto emocional que lo mantuvo ausente de su negocio durante dos días.
Comunidad en alerta
El hecho ha generado preocupación entre los comerciantes del sector, muchos de los cuales ya han reforzado sus medidas de seguridad: instalación de rejas, cámaras de vigilancia y turnos compartidos de cierre. “Aquí nunca había pasado algo así. Todos nos conocemos. Esto nos tomó por sorpresa”, expresó un vecino que prefirió no identificarse.
El colmado asaltado es un punto de encuentro habitual para familias del barrio, donde no solo se venden productos, sino que también se recargan celulares, se pagan servicios y se comparte información comunitaria. Su cierre temporal ha afectado la rutina diaria de decenas de hogares.
Respuesta policial
La Policía Nacional informó que ya inició las investigaciones correspondientes. Agentes de la DICRIM recorren la zona y analizan grabaciones de cámaras de seguridad de negocios aledaños. Además, se anunció un refuerzo en los patrullajes nocturnos en los barrios San Antonio, La Agüita y El Centro, especialmente entre las 10:00 p.m. y las 5:00 a.m.
Las autoridades también hicieron un llamado a los ciudadanos a reportar motocicletas sospechosas o personas merodeando negocios fuera del horario comercial.
Recomendaciones para comerciantes
Las autoridades recomiendan a dueños de colmados y negocios pequeños:
- No manipular grandes sumas de dinero en el local; deposita lo recaudado diariamente
- Evitar cerrar el negocio solo, especialmente de noche; pide compañía a un vecino o familiar
- Instalar iluminación exterior y cámaras visibles (aunque sean falsas, disuaden a delincuentes)
- Reportar cualquier actividad sospechosa al 911 o a la estación policial más cercana
Solidaridad vecinal
Vecinos del barrio han organizado rondas comunitarias voluntarias y planean reunirse con el alcalde Fernando Castillo para solicitar mayor presencia policial, la instalación de luminarias en zonas oscuras y la creación de un comité de seguridad barrial.
“La calle es de todos. Si cuidamos entre todos, el delincuente no tiene espacio”, afirmó un líder comunitario. Mientras tanto, la comunidad se ha unido para apoyar al comerciante afectado con donaciones y turnos de vigilancia hasta que reabra por completo.
